Saltar al contenido

Misery o las cuatro procesiones del Viernes Santo en Oviedo

Atípica esta semana santa que nos está tocando vivir en 2023: sol, calor, incendios, mucha gente, procesiones que en estos últimos años están intentando meternos en el circuito de ciudades a visitar en Semana Santa, aunque todavía estemos a distancia de otros lugares que lo hacen y muy bien, con fiesta, con impresionantes puestas en escena o con el recogimiento más absoluto.

Este viernes en Oviedo no todas las procesiones tuvieron que ver con la santidad:

La primera era la que había a la hora del almuerzo en un conocido restaurante/sidrería que no necesita mi publicidad pero que tiene otros dos locales en Oviedo y que no generaban la misma expectativa, así como ninguna otra de las sidrerías de la Ruta en la que también éste del que hablo se enclava.

La segunda tiene que ver con el futbol y los cinco mil jugadores que vinieron a la Oviedo Cup (evento que explica por qué alojarse en Oviedo estos días pasó de imposible a prohibitivo) con sus respectivas familias.

La tercera es la propiamente religiosa. Dos procesiones que se unían en la calle San Francisco y que generó la misma expectación que las carrozas del día en América, por lo que de espectáculo tiene.

La última fue para mí la más interesante porque tiene que ver con la cultura, con el Teatro, con la producción asturiana y con los tabúes sobre programar en días de fiesta.

Me estoy refiriendo a la puesta en escena de «Mysery«, la adaptación teatral que de la obra homónima de Stephen King realizó William Goldman y llevan a cabo Saltantes Teatro, bajo la dirección de Andres Dwyer y con Luis Alija como Paul Sheldon, Nerea Vázquez como Annie Wilkes y Carlos Dávila como Sheriff Buster. Se trata de una obra de terror psicológico (como se espera de algo escrito por el escritor de Portland) con doble función en el teatro Filarmónica de Oviedo.

El hilo argumental es sobradamente conocido: Paul Sheldon es un exitoso escritor de novelas románticas que sufre un grave accidente conduciendo durante una tormenta de nieve, y que se despierta en la casa de Annie Wilkes, enfermera que le ha rescatado y cuida mientras se recupera, declarada admiradora de las novelas de Sheldon, quien tras varios días comienza a dudar si estará a salvo en ese supuesto refugio.

Aunque con pocos actores, el planteamiento es similar al de una obra de más envergadura. El texto teatral tiene bastante de cinematográfico, y la utilización de la luz colabora en la creación de la atmósfera de terror. Con este proyecto, la compañía, fundada en 2013, da un paso más en su trayectoria, tras haber producido obras como “El método Grönholm”, “MOBA-Juegos de guerra”, “Casting” o “El Jorobado”.

Interior del teatro Filarmónica, preparándose para «Misery»

«Mysery» consiguió el viernes completar el 80% de las entradas del Teatro a las 20:00 horas, todavía con sol y calor, con dos procesiones rodeándolo y 5000 mini futbolistas convocados por la Cup. Esto quiere decir que no nos pueden vender que no hay público para la cultura, tampoco quiere decir que la cultura deba ser gratis (entradas a la venta entre 16 y 24€) y tampoco que la producción asturiana no interese.

A ver si vamos poniendo en el contexto que se merece la palabra INDUSTRIA CULTURAL; a ver si vamos abriendo nuestras mentes a que no todo el mundo tiene que ir al mismo sitio a la vez, y que todas las cosas que se hacen para el ocio y el entretenimiento tienen público porque la cultura tiene público y el espectáculo callejero también, y que el fútbol no puede con todo.

Deja una respuesta